Lila Rose, una estudiante de la UCLA y Presidente del grupo pro-vida Live Action, se hizo pasar por una adolescente de 13 años en una cita con una enfermera en una clínica de abortos en el estado de Indiana, Estados Unidos, hace unos meses. Una de las primeras cosas que Rose le explica a la enfermera, es que el padre de su bebé tiene 31 años.
A este dato, la enfermera responde: "no quiero saber la edad que tiene, ¿ok?". Seguidamente le explica a la muchacha que en estos casos debe darse parte a las autoridades pero repite: "ok, no escuché la edad. No quiero saber la edad". A continuación le señala que este hecho "puede reportarse como una violación, y eso es abuso de menores" al tiempo que le "aconseja" mentir sobre la edad del padre: "lo has visto por ahí, sabes que tiene 14 años, está en tu grado, lo que sea. Sabes a lo que me refiero".
Tras este primer "consejo" la enfermera le explica a Rose que para poder abortar sin problemas legales puede cruzar la frontera del estado hasta Illinois en donde no tendría trabas de este tipo. "Recomendación" que la misma enfermera reconoce no puede hacer por ser ilegal.
Este video es parte de "The Mona Lisa Project", una investigación que muestra "las rutinas ilegales de los abortistas de Planned Parenthood", explicaron en una reciente conferencia de prensa los miembros de Live Action Films. "El lanzamiento de este video es solo una muestra", añadieron.
"The Mona Lisa Project demuestra cuán rápido el irrespeto de la industria del aborto por los niños no nacidos se convierte en irrespeto por todos los seres humanos. Planned Parenthood no ofrece soluciones para las víctimas de violación: les dan un aborto y una caja de condones y los mandan de vuelta a los brazos del abusador".
El presupuesto de esta organización radicalmente anti-vida bordea los mil millones de dólares. Casi un tercio del mismo lo provee el Gobierno.
Para ver el video, en inglés, puede ingresar a: http://liveactionfilms.org
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