Invitado
para asistir a unas jornadas sobre objeción de conciencia, promovidas por la ONG
en defensa de la familia y en medio del debate por la aplicación del matrimonio
de personas del mismo sexo, el abogados especialista en derecho canónico Juan
Navarro Floria, llegó a la provincia.
El especialista abordó el tema desde el
punto de vista practicó y con ejemplos para clarificar la temática.
“La
objeción de conciencia no es que cada uno hace lo que quiere en determinados
momentos, sino que tiene requisitos. Uno de ellos es que el objetor puede hacer
uso de la objeción de conciencia cuando la persona tiene una convicción
profunda. No se aplica cuando vengo y digo que hoy no tengo ganas de hacer algo,
sino que esto obedece a una convicción que hay que demostrar. Por ejemplo la
persona puede decir que pertenece a una confesión religiosa que sostiene tales o
cuales principios, o decir que toda la vida se comportó de la misma manera. No
puede ser que hoy sea objetor y mañana no. Para la persona es algo que debe ser
permanente. Es dificil prever todos los casos que se planteen en el tema
objeción de conciencia. Se pueden prever reglas generales y después ver los
casos concretos”.
¿Quién es la persona o institución que debe
tratar el pedido de objeción de conciencia?
Para poder ejercer el
derecho de objeción de conciencia, o bien la ley preve el mecanismo especifico
para hacerlo, o bien en el momento la persona lo manifiesta y algún superior
deberá autorizarlo y si no lo autoriza el superior se deberá acudir a un juez
por intermedio de un amparo, quien deberá resolver el planteo en un periodo
sumarísimo o muy rápido. En algunos casos se preven organismos creados para
intervenir al momento de presentarse casos de objeción de conciencia de acuerdo
a la complejidad del tema. Por ejemplo, la provincia de San Luis que ya tiene
legislado el tema, hay una ley sobre la objeción de conciencia, se creó un
consejo consultivo que intervendrá en los casos complejos. Ese consejo esta
integrado por las distintas expresiones religiosas, los pueblos originarios, las
distintas corrientes de pensamiento. Ellos son quienes intervienen y manifiestan
si hay argumentos como para aplicarse la objeción de
conciencia.
Por ejemplo, un matrimonio de personas del mismo sexo
va a un registro civil y el juez se opone a casarlos acudiendo a la figura de
objeción de conciencia. ¿Este hecho puede ser tomado también como
discriminatorio?
La objeción de conciencia justifica la acción y por
eso no debería ser sancionada esa persona. Además en este caso hay que aplicar
la practicidad ante todo. Supongamos que llegan esas dos personas del ejemplo y
se quieren casar y justamente el funcionario del Registro Civil se opone al
hecho. A su ves los superiores obligan al funcionario a llevar adelante el
proceso, esa persona lo va hacer con una cara de pocos amigos, sin ganas, va
cumplir las formas del modo mas estricto etc. En definitiva no va ser un buen
momento ni para las personas que quieren casarse, ni para el funcionario que las
va a casar. Es mucho mas razonable que esa persona diga, esto no lo hago, que su
colega del escritorio de al lado lo haga con mas gusto y alegría por que no se
opone a estos enlaces y así todos van a estar contentos. Desde el punto de vista
práctico, es mucho mas fácil admitir la objeción de conciencia y así evitar un
mal rato para todo el mundo.
Su planteo lo hace desde la persona
que se opone al cumplimiento de una ley o norma, pero desde el punto de vista de
la pareja que quiere casarse, ellos lo pueden ver como un acto
discriminatorio...
Es un dato de la realidad concreto el que existan
personas que no quieran casar a homosexuales, es un hecho. Para mucha gente es
muy violento participar de un acto de estas características y los que quieren
casarse deben tener ese derecho garantizado. Ahora esas personas no pueden
imponer a otras algo que no quieren hacer, ni tampoco pueden esperar que esa
personas que lo casó le festeje una acción que no comparte.
Para
que quede claro, la objeción de conciencia no es ilimitada ni puede ser tomada
como una especie de libertinaje.
Es algo muy serio y en el sentido
estricto. El objetor de conciencia está dispuesto a que los sancionen o
castiguen, esos son los ejemplos de los mártires cristianos de los primeros
siglos. Ellos fueron objetores de conciencia, se opusieron a rendirle culto a
los emperadores.
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